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{"id":13272,"date":"2016-11-14T09:20:47","date_gmt":"2016-11-14T14:20:47","guid":{"rendered":"https:\/\/www.ibrnj.org\/?p=13272"},"modified":"2019-10-11T18:27:47","modified_gmt":"2019-10-11T18:27:47","slug":"prueba-divina","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/heraldodegracia.org\/2016\/11\/prueba-divina\/","title":{"rendered":"Prueba divina"},"content":{"rendered":"

$\"\"$ A.W. Pink<\/strong><\/p>\n

Mas \u00e9l conoce mi camino; me probar\u00e1, y saldr\u00e9 como oro (Job 23:10).<\/em><\/p>\n

\u201cMe probar\u00e1\u201d. \u201cEl crisol para la plata, y la hornaza para el oro; pero Jehov\u00e1 prueba los corazones\u201d (Pr. 17:3). Esta fue la manera como Dios probaba a Israel en la antig\u00fcedad y su manera de probar al cristiano en la actualidad. Justo antes de que Israel entrara a Cana\u00e1n, Mois\u00e9s hizo un recuento de la historia del pueblo desde que hab\u00edan salido de Egipto. Dijo: \u201cY te acordar\u00e1s de todo el camino por donde te ha tra\u00eddo Jehov\u00e1 tu Dios estos cuarenta a\u00f1os en el desierto, para afligirte, para probarte, para saber lo que hab\u00eda en tu coraz\u00f3n, si hab\u00edas de guardar o no sus mandamientos\u201d (Dt. 8:2). De la misma manera, Dios nos prueba, examina y humilla.<\/p>\n

\u201cMe probar\u00e1\u201d.<\/em> Si fu\u00e9ramos m\u00e1s conscientes de esto, resistir\u00edamos mejor la hora de aflicci\u00f3n y ser\u00edamos m\u00e1s pacientes cuando sufrimos. Las irritaciones cotidianas de la vida, las cosas que molestan tanto, \u00bfqu\u00e9 significan? \u00bfPor qu\u00e9 son permitidas? La respuesta es esta: \u00a1Dios lo est\u00e1 \u201cprobando\u201d! Esa es la explicaci\u00f3n (por lo menos, en parte) de aquel desencanto, la p\u00e9rdida de sus esperanzas terrenales, en medio de esa gran p\u00e9rdida: Dios estaba, est\u00e1 prob\u00e1ndolo<\/em>. Dios est\u00e1 probando su humor, su valent\u00eda, su fe, su paciencia, su amor y su fidelidad.<\/p>\n

\u201cMe probar\u00e1\u201d.<\/em> Con cu\u00e1nta frecuencia los santos de Dios ven a Satan\u00e1s como la \u00fanica causa de sus problemas. Consideran que ese gran enemigo es responsable por muchos de sus sufrimientos. Pero esta manera de pensar no trae verdadero consuelo al coraz\u00f3n. \u00a1No negamos que el diablo produce mucho de lo que nos hostiga! Pero por encima de Satan\u00e1s \u00a1est\u00e1 el Se\u00f1or todopoderoso! El diablo no puede tocar un cabello de nuestra cabeza sin el permiso de Dios, y cuando le es permitido molestarnos y distraernos, aun entonces \u00a1es solo Dios quien lo usa para \u201cprobarnos\u201d! Aprendamos, entonces, a mirar m\u00e1s all\u00e1 de las causas y los instrumentos secundarios de Aquel que obra todas las cosas seg\u00fan el consejo de su voluntad (Ef. 1:11). Esto fue lo que hizo Job.<\/p>\n

En el primer cap\u00edtulo del libro de Job, encontramos a Satan\u00e1s que le pide permiso a Dios para hacer sufrir a su siervo Job. Us\u00f3 a los sabeos para destruir los animales de Job (1:15), envi\u00f3 a los caldeos para dar muerte a sus siervos (1:17) y caus\u00f3 que un viento fuerte matara a sus hijos (1:19). \u00bfY cu\u00e1l fue la reacci\u00f3n de Job? Exclam\u00f3: \u201cDesnudo sal\u00ed del vientre de mi madre, y desnudo volver\u00e9 all\u00e1. Jehov\u00e1 dio, y Jehov\u00e1 quit\u00f3; sea el nombre de Jehov\u00e1 bendito\u201d (1:21). Job mir\u00f3 m\u00e1s all\u00e1 de los ejecutores humanos, m\u00e1s all\u00e1 de Satan\u00e1s que los hab\u00eda empleado, puso sus ojos en el Se\u00f1or que tiene control de todo. Comprendi\u00f3 que el Se\u00f1or lo estaba probando. Vemos lo mismo en el Nuevo Testamento. Juan escribi\u00f3 a los santos que sufr\u00edan en Esmirna: \u201cNo temas en nada lo que vas a padecer. He aqu\u00ed, el diablo echar\u00e1 a algunos de vosotros en la c\u00e1rcel, para que se\u00e1is probados\u201d (Ap. 2:10). El que fueran echados en la c\u00e1rcel era simplemente que Dios los \u201cprobaba\u201d.<\/p>\n

\u00a1Cu\u00e1nto perdemos por olvidar esto! Qu\u00e9 consuelo es para el coraz\u00f3n zarandeado por los problemas, saber que no importa de qu\u00e9 forma se presente la prueba, no importa cu\u00e1l sea el ejecutor que indigna, es Dios quien est\u00e1 \u201cprobando\u201d a sus hijos. \u00a1Qu\u00e9 ejemplo perfecto nos da el Salvador! Cuando sus captores se acercaron en el jard\u00edn y Pedro desenvain\u00f3 su espada y le cort\u00f3 la oreja a Malco, el Salvador le dijo: \u201cMete tu espada en la vaina; la copa que el Padre me ha dado, \u00bfno la he de beber?\u201d (Jn. 18:11). Los hombres estaban por descargar su terrible ira sobre \u00e9l, la serpiente herir\u00eda su calca\u00f1ar, pero \u00e9l mir\u00f3 m\u00e1s all\u00e1. Querido lector, no importa lo amargo de su contenido (infinitamente menos que lo que el Salvador bebi\u00f3), aceptemos la copa porque viene de la mano del Padre.<\/p>\n

En algunos casos, tendemos a cuestionar la sabidur\u00eda de Dios y su derecho a probarnos. Muy a menudo murmuramos contra sus dispensaciones^{4<\/sup>. \u00bfPor qu\u00e9 raz\u00f3n me da Dios una carga tan intolerable? \u00bfPor qu\u00e9 otros tienen a sus seres queridos, y los m\u00edos me fueron quitados? \u00bfPor qu\u00e9 me es negado tener buena salud y fuerzas, y quiz\u00e1 aun el don de la vista? La primera respuesta a todas las preguntas como esas es: \u201cOh hombre, \u00bfqui\u00e9n eres t\u00fa, para que alterques con Dios?\u201d (Ro. 9:20) El que alguno cuestione los tratos del gran Creador es una insubordinaci\u00f3n maligna. \u201c\u00bfDir\u00e1 el vaso de barro al que lo form\u00f3: \u00bfPor qu\u00e9 me has hecho as\u00ed?\u201d (Ro. 9:20). \u00a1Con qu\u00e9 seriedad necesita cada uno de nosotros clamar a Dios para que su gracia silencie nuestras palabras rebeldes y calme la tempestad dentro de nuestro desesperadamente malvado coraz\u00f3n!<\/p>\n}

Tambi\u00e9n 1 Pedro 4:12-13 nos dice: \u201cAmados, no os sorprend\u00e1is del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extra\u00f1a os aconteciese, sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que tambi\u00e9n en la revelaci\u00f3n de su gloria os goc\u00e9is con gran alegr\u00eda\u201d. Aqu\u00ed se expresan los mismos pensamientos que en el pasaje anterior. Hay una causa detr\u00e1s de nuestras \u201cpruebas\u201d, y por eso no hemos de considerarlas extra\u00f1as, sino esperarlas. Y tambi\u00e9n encontramos aqu\u00ed la esperanza bendita de ser ricamente recompensados en la segunda venida de Cristo. Despu\u00e9s vemos que se agrega el mensaje de que no solo debemos encarar estas pruebas con la fortaleza de la fe, sino que debemos regocijarnos tambi\u00e9n en ellas, porque Dios nos permite compartir \u201clas aflicciones de Cristo\u201d. \u00c9l tambi\u00e9n sufri\u00f3: suficiente le es entonces \u201cal disc\u00edpulo ser como su maestro\u201d (Mt. 10:24-25).<\/p>\n

\u201cMe probar\u00e1\u201d.<\/em> Querido lector cristiano, no hay excepciones. Dios tuvo un solo Hijo sin pecado, pero nunca uno sin aflicciones. Tarde o temprano, de una forma u otra, pasaremos por pruebas duras y pesadas. \u201cY enviamos a Timoteo nuestro hermano\u2026 para confirmaros y exhortaros respecto a vuestra fe, a fin de que nadie se inquiete por estas tribulaciones; porque vosotros mismos sab\u00e9is que para esto estamos puestos\u201d (2 Ts. 3:2-3). Tambi\u00e9n est\u00e1 escrito: \u201cEs necesario que a trav\u00e9s de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios\u201d (Hch. 14:22). As\u00ed ha sido en todas las \u00e9pocas. Abraham fue \u201cprobado\u201d, probado con severidad. Igualmente lo fueron Jos\u00e9, Jacob, Mois\u00e9s, David, Daniel, los Ap\u00f3stoles, etc.<\/p>\n

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\n4. dispensaciones \u2013 actos y tratos divinos.<\/p>\n

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\nA.W. Pink<\/strong> (1886-1952): Pastor, maestro itinerant de la Biblia, autor de Studies in the Scriptures<\/em> (Estudios en las Escrituras) y muchos libros; nacido en Nottingham, Inglaterra, emegr\u00f3 a los Estados Unidos y luego volvi\u00f3 a su tierra en 1934.<\/p>\n

Publicado con permiso de Chapel Library. <\/em><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"