Historia del Protestantismo en España Parte IV
Bonifacio Lozano
Últimos años:
Joh 4:34 Jesús les dijo*: Mi comida es hacer la voluntad del que me envió y llevar a cabo su obra.
Joh 4:35 ¿No decís vosotros: “Todavía faltan cuatro meses, y después viene la siega”? He aquí, yo os digo: Alzad vuestros ojos y ved los campos que ya están blancos para la siega.
Joh 4:36 Ya el segador recibe salario y recoge fruto para vida eterna, para que el que siembra se regocije juntamente con el que siega.
Joh 4:37 Porque en este caso el dicho es verdadero: “Uno es el que siembra y otro el que siega.”
Joh 4:38 Yo os envié a segar lo que no habéis trabajado; otros han trabajado y vosotros habéis entrado en su labor.
Hemos estado viendo cómo desde los tiempos de los Reyes Católicos, la Reforma encontró una enorme oposición en España.
1.Cipriano de Valera
2.Casiodoro de Reina
3.Enzinas
4.Del Corro
5.Valdés
6.Julian Hernández
7.Perez de Pineda
Muchos de ellos estuvieron ayudando desde el exilio a la iglesia en España, otros colaboraron con Calvino en Ginebra, traduciendo al español sus obras, otros dieron un gran avance a la expansión de la fe por medio de las Sagradas Escrituras, al traducirlas al español. Realmente, aunque el impacto de la reforma en España fue breve en el tiempo, dio frutos de enorme trascendencia para que la Palabra de Dios fuera proclamada.
Pasamos por la tremenda persecución que se desató contra todo cuanto fuera el movimiento reformado, a manos del tribunal del Santo Oficio, dejando destrucción y muerte a su alrededor, y cómo acabó con cualquier movimiento de reforma durante siglos, aunque suponemos que en la clandestinidad, Dios mantuvo un pueblo fiel como hizo en tiempos de Elías.
Vimos como la primera iglesia se pudo abrir oficialmente en Cádiz en el año 1836 y como a partir de aquel año, con mayor o menor dificultad se ha ido predicando el evangelio de una manera más tolerable.
Acordaos de vuestros pastores…
No podía dejar pasar esta oportunidad para honrar la memoria de muchos hombres que dejando todo lo que le ofrecía su vida en sus países de origen, llegaron a España para traer la palabra de Dios, y a tantos y tantos como de forma anónima, tanto nacionales como extranjeros, han sido decisivos para que el evangelio siga su curso y Dios siga llamando a su pueblo mediante la predicación de Su Palabra. Estos hombres sirvieron a Dios en medio de grandes dificultades, y quisiera honrar en esta mañana la memoria de aquellos misioneros ingleses que vinieron al corazón de España para predicar la Palabra de Dios, especialmente me refiero a Percy Buffard, a quien posteriormente fue el pastor, Ernest Brown, y quien luego también tomó el pastorado, uno de los hijos de Percy, Carlos Buffard.
El trabajo incansable de este hombre, a principios del siglo XX, dejando su comodidad, teniendo en cuenta el nivel de vida que ya en aquellos años disfrutaban los ingleses, el cambio total que supuso en cuanto a su forma de vida y en cuanto a su cultura, y cómo en obediencia a la Palabra de Dios, cambió radicalmente su comodidad y perspectivas de futuro por servir a Dios en medio de su generación en un lugar donde Cristo fuera predicado, nos hace ver la gran responsabilidad que la iglesia de todos los tiempos tiene de llevar el evangelio a toda criatura.
Este hombre se ubicó en la zona centro de España, en unos años donde el retraso del país era notorio frente a sus países vecinos. A uno le parecería entrar en una pesadilla ver la forma de vida y los medios en los que se desarrollaba la vida en España al finalizar el siglo XIX y entrar en el XX.
Nada importó a estos misioneros. El evangelio predicado y proclamado desde la reforma, que prendió fuego en los corazones de gran parte de Europa, puso también en su sentir la necesidad de organizar movimientos misioneros que fueran capaces de cumplir el mandato del Señor para ir a todas las naciones y predicar el evangelio a toda criatura.
¿Cómo podríamos haber recibido el evangelio de gracia si no hubiera sido por la obediencia a la Palabra de Dios de muchos de nuestros antepasados en la fe? ¿Cómo podríamos haber sido los receptores de su gracia, si no fuera por el temor y la obediencia a Dios por parte de hombres que dejaron todo por servir a su generación? ¿Cómo podrían haber ido si no tuvieran el apoyo espiritual y financiero para predicar el evangelio en medio de grandes dificultades?
¿Cómo hubiera sido evangelizada España, sin la aportación al reino de Cristo de hombres que, con sus familias, se pusieron a llevar a cabo, con mucho sacrificio y esfuerzo, la obra de evangelista?
Después de que este hombre vio la necesidad del evangelio, y como prendía en los corazones de los hombres la Palabra viva, se preparó en Inglaterra durante 3 años, volvió apoyado por una misión, con escasos medios y pocos recursos, pero lo suficiente como para vivir por fe sabiendo que Dios proveería cada día para las necesidades mas elementales, como así ocurrió.
Instalándose en ese lugar de la mancha de cuyo nombre no quiero acordarme, este hombre tuvo la visión y la pasión de promover el evangelio preparando a hombres idóneos para el ministerio, dándoles la formación adecuada para que pudieran servir a Dios en su generación, y extendiendo la evangelización a las poblaciones de su entorno. Así la obra de Dios creció en un época donde había hambre del pan de la vida, y donde Dios bendijo su Palabra y llevó mucho fruto.
Recientemente la iglesia de Valdepeñas cumplió 90 años desde su fundación como tal, pero mucho antes, este hombre, y otros que salieron de su ministerio de enseñanza, estuvieron predicando sin descanso a las ovejas perdidas del Israel espiritual.
Con un violín, con una sonrisa, y con la fuerza que da el Espíritu de Dios cuando su pueblo hace lo que tiene que hacer, este hombre pudo ubicar su base de operaciones para ganar mas almas desde mi ciudad natal, pudo dar atenciones al cuerpo físico, con la creación de una enfermería, de un orfanato, y también al cuerpo espiritual, con una iglesia que se estableció y que aún sigue en pie después de tantos años.
Los pastores que años después le siguieron en el ministerio, aunque tuvieron que volver a su país por causa de la guerra civil, estudiaron en el seminario Spurgeon de Inglaterra. Dios usó grandemente a Ernest Stuart Brown, un hombre eminentemente inglés, quien cuando era joven, y ante una serie de conferencias que Carlos Buffard impartió en Inglaterra sobre la gran necesidad que había de obreros en España, la semilla fue plantada en su corazón, y años después llegaría a ser el pastor de la iglesia protestante allí.
Este hombre respondía al típico gentleman inglés. Alto, delgado, con mirada penetrante, con su sombrero inglés característico, con una maestría tocando el órgano de viento impulsado por pedales, que cuando en la iglesia se disponían a cantar hacia vibrar a la congregación con las notas de alabanza a nuestro Dios.
El respeto que este hombre causaba era enorme en una población eminentemente agrícola, y entre quienes con amor y con firmeza ejercía su liderazgo tanto para la iglesia puesta bajo su dirección, como para las autoridades locales. Durante muchos años, exceptuando el intervalo de la guerra civil, en el que tuvo que volver a su país, enseñó las grandes doctrinas del evangelio a grandes y pequeños.
¿Qué podemos decir de tantos hombres que vivieron para traernos el evangelio?
Alzad vuestros ojos:
Reconociendo su trabajo, y el bien que aportaron a nuestra vida, reconociendo al Dador de todo bien que usó a estos hombres para hacernos llegar la salvación por medio de la predicación de su Palabra, no tengo por menos que traer ante vosotros el relato bíblico que nos habla de cuando nuestro Señor, después de que ha estado hablando con la mujer samaritana, y ante la llegada de los discípulos, les dice: ….
Joh 4:35 ¿No decís vosotros: Aún faltan cuatro meses para que llegue la siega? He aquí os digo: Alzad vuestros ojos y mirad los campos, porque ya están blancos para la siega.
Esta escena se recoge cuando los discípulos llegan de comprar comida al lugar donde Cristo había estado hablando con la mujer samaritana.
Posiblemente el entorno del lugar donde estaba el pozo estaba lleno de cultivos de cereales como es habitual en los países mediterráneos.
Posiblemente los Samaritanos que habían escuchado el testimonio de la mujer estaban de camino del pozo, aunque todavía a una distancia considerablemente lejana, y apuntando su vista hacia aquellos que se acercaban, el Salvador dijo a los discípulos, “alzad vuestros ojos y mirad los campos, porque ya están blancos para la siega”.
Al contrario de lo que ocurre aquí en esta parte de Estados Unidos, donde todo esta lleno de vegetación, en España, en los países mediterráneos, los meses de junio, julio, agosto y septiembre, presentan unos campos sembrados de cereales, pero que se vuelven blancos, con un calor abrasador, y sin nada de verdor ni frescor a la vista. Realmente cuando el Señor le pidió a esta mujer samaritana un vaso de agua, el calor debía ser terrible, y sin ningún lugar para cobijarse.
Los campos realmente estaban blancos para ser segados, pero los campos espirituales también estaban en su momento mas álgido para recoger la semilla.
Joh 4:36 Y el que siega recibe salario, y recoge fruto para vida eterna, para que el que siembra goce juntamente con el que siega.
Aquí tenemos un trabajo cuya participación supone un privilegio. Pero puede darse el caso, y se da, de que el sembrador haya trabajado arduamente para proclamar el evangelio y exponerlo para la salvación de almas, pero no se le permitió disfrutar en esta vida del éxito que Dios dio a sus esfuerzos.
El segador, sin embargo, da testimonio del fruto; recoge el fruto que otros sembraron, sin embargo, sembrador y segador se regocijarán juntos en la salvación eterna de aquéllos que han sido salvos como fruto de sus esfuerzos por predicar la Palabra de Dios.
Joh 4:37 Porque en esto es verdadero el dicho: Uno es el que siembra, y otro es el que siega.
Esto es de consuelo para aquellos que siembran, porque no siempre recogerán el fruto de su trabajo. Esta cosecha que obtuvo el Señor en Sicar fue el resultado del trabajo de sembradores anteriores. Estos Samaritanos ya tenían conocimiento sobre la llegada del Mesías, sabían acerca de la promesa de salvación, y esto fue puesto en sus corazones por el ministerio fiel de otros siervos de Dios.
En el ejemplo de esta mujer samaritana, se da el hecho de que uno siembra y otro siega. Cristo había satisfecho la necesidad en el corazón de esta mujer, y lo había hecho por el testimonio de los profetas que ya habían despertado en ella esa necesidad. Otros habían sido los sembradores.
Uno nunca sabe como Dios utilizará su Palabra para producir bendición. Lo que si sabemos es lo que tenemos que hacer, independientemente del fruto que aparezca ante nuestros ojos.
Ya nos gustaría que todos aquellos a quienes hablamos el evangelio se convirtieran, o que a todas las congregaciones donde se predica el evangelio, ya nos gustaría poder ver la gran demanda de la Palabra de Dios en nuestro país como la hubo en otros tiempos, pero tristemente no es así.
Aquí vemos la deferencia del Señor al reconocer el trabajo de esos sembradores anteriores, que se esforzaron en predicar la Palabra de Dios, y cuyo fruto se veía ahora, cuando ya habían muerto, pero la Palabra de Dios no había muerto, sino que en su momento, trajo el fruto de la salvación.
Todos nosotros nos beneficiamos de sembradores fieles que durante años predicaron la Palabra.
Ellos no recogieron el fruto, pero todos los que estamos hoy aquí somos el fruto del esfuerzo y sacrificio de aquellos sembradores. Esta es la ilustración que el Señor les está dando a sus discípulos, al ver delante de ellos aquellos campos de cereales. Uno es el que siembra, y otro el que siega. El asunto es que los campos ya están listos para ser segados, pero ¿quien hará el trabajo?
El Señor no deja de recordarles a sus discípulos la deuda que tenemos al trabajo de aquellos que habían puesto la semilla del evangelio.
¡Qué consuelo encontramos para el sembrador de hoy! ¡Que consuelo para nosotros en España que puede parecer que nuestro trabajo no va a ningún sitio, que no produce fruto, pero si somos diligentes sembrando “la semilla,” debemos recordar que Dios bendecirá su trabajo a su tiempo, aunque otro recoja el fruto.
Nuestra responsabilidad es ser fieles a Dios en medio de nuestra generación, transmitiendo las buenas nuevas de salvación a pecadores, para que nuestro trabajo quede cumplido.
1Co 15:58 Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.
Esta enseñanza del apóstol no es trivial si queremos cumplir con nuestro cometido de ser columna y baluarte de la verdad y actuar como luz y sal en la tierra. Esa es nuestra labor y no otra.
El Señor enviaba a sus discípulos a predicar con este propósito:
Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda dolencia
Mat 10:11 Mas en cualquier ciudad o aldea donde entréis, informaos quién en ella sea digno, y posad allí hasta que salgáis.
Mat 10:12 Y al entrar en la casa, saludadla.
Mat 10:13 Y si la casa fuere digna, vuestra paz vendrá sobre ella; mas si no fuere digna, vuestra paz se volverá a vosotros.
Mat 10:14 Y si alguno no os recibiere, ni oyere vuestras palabras, salid de aquella casa o ciudad, y sacudid el polvo de vuestros pies.(C)
Mat 10:15 De cierto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma y de Gomorra,(D) que para aquella ciudad.
Si no quieren oír el evangelio, eso no es cosa nuestra. Lo que si es nuestra responsabilidad es sembrar, y a partir de ahí, es Dios quien en su soberana voluntad dará el crecimiento. Pero eso no es cosa nuestra. Lo que si es nuestra responsabilidad, es anunciar el evangelio.
El éxito del trabajo de los discípulos se nos narra al principio del capitulo 4 de Juan
Cuando, pues, el Señor entendió que los fariseos habían oído decir: Jesús hace y bautiza más discípulos que Juan …
Ellos habían bautizado a muchos discípulos. Uno puede imaginar el júbilo de los discípulos al ver el fruto de su trabajo, pero para reprimir su vanidad, Cristo aquí les dice, Joh 4:38 Yo os he enviado a segar lo que vosotros no labrasteis; otros labraron, y vosotros habéis entrado en sus labores.
Él les recuerda que habían prosperado porque otros habían trabajado antes que ellos. Esta es una palabra que anima al sembrador y que serena al segador, para que no crea que es por él por quien Dios salva y se llene de vanidad. Nosotros podemos observar que cuando el Señor envía a los suyos a “segar,” Él les dirige a campos que ya han sido sembrados. Otro ha hecho el mayor y mas duro trabajo.
Cristo usó aquí una palabra que significa: esforzarse hasta el agotamiento,”
De hecho es la misma palabra que se usa al principio del capítulo refiriéndose al Salvador, donde leemos, Jesús, cansado del camino, se sentó así junto al pozo.”.
Lutero decía habitualmente: “El ministerio no es la ocupación de un hombre ocioso”. La carga que debe de tener cualquier verdadero hijo de Dios no es la de un hombre ocioso.Tenemos que ser responsables con lo que Dios ha puesto en nuestras manos para administrarlo con fidelidad, sin olvidar que tenemos que sembrar, y esto requiere tiempo, esfuerzo y oración. Las tres cosas van en intima unión.
El hacer algún tipo de trabajo en un lugar no es ningún criterio para que en otro lugar distinto deba aplicarse el mismo método. Tenemos que usar el discernimiento espiritual y la oración para saber como tenemos que actuar en cada escenario. En los países del este de Europa, y en los países americanos, la siembra y la siega son inmediatas.
En España no es así, requiere un periodo enorme de tiempo.
Tiempos de sequía:
Muchas iglesias se empiezan a llenar con la llegada de inmigrantes en los últimos años, quienes se acercan principalmente a las iglesias pentecostales y carismáticas. Le siguen en número las arminianas. Las reformadas son una minoría, entre las que se pueden encontrar algunas presbiterianas.
En Madrid capital, solo existe una iglesia presbiteriana, y una iglesia bautista reformada, que es la nuestra. Mientras que en toda la provincia tenemos una iglesia presbiteriana mas.
Las iglesias reformadas son no solo pocas, en un país con 44 millones de habitantes, sino también reducidas.
La realidad que nos encontramos hoy es:
No hay una comunidad evangélica asentada en doctrina y fuerte para predicar el evangelio. Se hacen esfuerzos evangelisticos contrarios al espíritu de la Escritura, que evidentemente no tienen ningún fruto.
No hay un firme carácter cristiano, ni principios que lo sustenten.
No hay predicación profunda de la palabra de Dios.
En este contexto social, con las reticencias de los españoles a todo lo religioso por la experiencia de la propia historia, hay un rechazo frontal para escuchar, porque la religión de hoy es el consumismo. La gente vive bajo la norma de que “comamos y bebamos porque mañana moriremos”.
Tantos siglos de dura imposición católica, tantos engaños descubiertos, tanta intolerancia, ha llevado a que la gente no quiera saber absolutamente nada de todo aquello que tenga la más minima pincelada de religión. Hemos pasado de un sometimiento a lo religioso que ocupaba todas las áreas de la vida social, por un breve tiempo de libertad a lo que tenemos ahora, que es libertinaje.
El gobierno socialista asume como propia esta corriente del momento, y no tiene ningún problema en atentar contra todos los principios morales que Dios ha puesto en el corazón de todos los hombres, vanagloriándose de aportar a la sociedad el desprecio mas reprochable hacia Dios, hacia la religión cristiana, y hacia las enseñanzas que Dios en su Palabra expone con claridad para ser obedecidas por todo hombre.
Hemos pasado de ser la reserva espiritual de occidente, de la religión católica, a ser pioneros en pervertir el sentido de la moral y en dar un carácter libertino a la vida del hombre. El gobierno, en vez de centrarse en sus responsabilidades de gobernar, promover el bien social, regular las actividades económicas, permitir el desarrollo y normas empresariales de competitividad aceptable, garantizar la libertad y los derechos de sus ciudadanos, sea cual sean sus convicciones, siempre y cuando sean lícitas y no atenten contra la ley, se regocija en atentar contra los valores cristianos.
En este sentido, las leyes que se aprueban por decreto, en contra de las conciencias de los ciudadanos, son de una trascendencia enorme. En su arrogancia, creen que por que decreten las leyes, la realidad cambia. Como no hay temor de Dios, ni respeto a su Nombre, ellos quieren ponerse en lugar de Dios, ellos quieren imponer sus leyes por decreto, leyes que tienen que ver con la conciencia de los hombres.
Dan 7:23 Dijo así: “La cuarta bestia será un cuarto reino en la tierra, que será diferente de todos los otros reinos; devorará toda la tierra, la hollará y la desmenuzará.
Dan 7:24 “Y los diez cuernos de este reino son diez reyes que se levantarán, y otro se levantará después de ellos; él será diferente de los anteriores y subyugará a tres reyes.
Dan 7:25 “Y él proferirá palabras contra el Altísimo y afligirá a los santos del Altísimo, e intentará cambiar los tiempos y la ley; y le serán entregados en sus manos por un tiempo, por tiempos y por medio tiempo.
Dan 7:26 “Pero el tribunal se sentará para juzgar , y su dominio le será quitado, aniquilado y destruido para siempre.
Dan 7:27 “Y la soberanía, el dominio y la grandeza de todos los reinos debajo de todo el cielo serán entregados al pueblo de los santos del Altísimo. Su reino será un reino eterno, y todos los dominios le servirán y le obedecerán.”
En Mt. 10:16 el Señor nos advierte: “He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas”.
Este mundo no es nuestro hogar. Somos extranjeros y peregrinos en un mundo hostil y lleno de peligros.
Eso es lo que Daniel nos declara en sus visiones, y eso es lo que el pueblo de Dios ha tenido que enfrentar a través de todas las edades.
Una guerra permanente:
La Biblia declara a Satanás como el león que anda buscando a quien devorar, y sin ninguna razón de peso, los sistemas políticos de este mundo tienen un afán colonizador, y el propósito de corromper la mente de los hombres, pretendiendo cambiar la ley de Dios, la ley moral y los principios establecidos de forma universal por medio de la Palabra de Dios, por sus propias leyes corruptas:
Dan 7:25 Y hablará palabras contra el Altísimo, y a los santos del Altísimo quebrantará, y pensará en cambiar los tiempos y la ley….
Eso lo que tenemos en nuestros días. Es el gobierno quien decreta y dice lo que está bien y lo que está mal. El es la ley. Usa los medios de comunicación para corromper los principios y que las cosas no aparezcan tan malas. La familia, el matrimonio, la educación, la vida que acaba de ser fecundada, …
La realidad que no se ve con los ojos de la carne, pero de la que nos advierten las Escrituras, es ese terrible monstruo del que Daniel se asustó y que persigue acabar con todo lo que tenga que ver con el cristianismo y con la Palabra de Dios.
Dan 7:7 Después de esto miraba yo en las visiones de la noche, y he aquí la cuarta bestia, espantosa y terrible y en gran manera fuerte,
Hay un real y autentico conflicto entre el reino de Dios y las tinieblas, un conflicto que es ganado por las tinieblas, bajo el gobierno de Dios, pero que tiene su tiempo prefijado para su completa derrota.
Entre tanto, nosotros no podemos permanecer tan tranquilos, dejándonos llevar por la corriente del mundo, e interpretando los asuntos que ocurren como enfrentamientos entre partidos políticos contrarios, entre oriente y occidente, entre árabes e israelitas. Ese no es el problema.
Hay una guerra real en la que el enemigo de las almas esta trabajando sin descanso para destronar a Dios de su lugar, y arrasar a su pueblo, y mientras no seamos conscientes de esta realidad, seremos como los que sueñan.
Si no somos conscientes de esta realidad, estaremos en este mundo haciendo lo que hace la gente del mundo.
Hermano, Si alguien te preguntase sobre tus planes de futuro para ti y los tuyos, ¿Qué le responderías? Tener una casa, cambiar de coche, …, respóndete a los planes que tienes en esta vida, porque si son esos, no te estas dando cuenta de que esa bestia ya te ha aplastado.
Luk 12:27 Considerad los lirios, cómo crecen; no trabajan, ni hilan; mas os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria(E) se vistió como uno de ellos.
Luk 12:28 Y si así viste Dios la hierba que hoy está en el campo, y mañana es echada al horno, ¿cuánto más a vosotros, hombres de poca fe?
Luk 12:29 Vosotros, pues, no os preocupéis por lo que habéis de comer, ni por lo que habéis de beber, ni estéis en ansiosa inquietud.
Luk 12:30 Porque todas estas cosas buscan las gentes del mundo; pero vuestro Padre sabe que tenéis necesidad de estas cosas.
Luk 12:31 Mas buscad el reino de Dios, y todas estas cosas os serán añadidas.
¿Para que vivimos en este mundo? Ante esta guerra real que tenemos delante de nosotros, ¿de qué manera estas actuando, como estas preparándote para combatir, cuales son tus armas, cuanto tiempo usas para reponer tus defensas? ¿Qué estas haciendo?
Estamos en medio de una batalla terrible, sin que aparentemente nos percatemos de esta realidad.
Dan 7:7 Después de esto miraba yo en las visiones de la noche, y he aquí la cuarta bestia, espantosa y terrible y en gran manera fuerte, la cual tenía unos dientes grandes de hierro; devoraba y desmenuzaba, y las sobras hollaba con sus pies, y era muy diferente de todas las bestias que vi antes de ella,
Es evidente que aunque a lo largo de todos los siglos ha habido algo así, ahora es mucho mas feroz y de alcance universal. Los medios de comunicación se encargan de cauterizar las conciencias, y su aspecto indescriptible se manifiesta cuando vemos el alcance tanto a nivel del numero de personas a las que afecta, como al nivel profundo que corrompe los principios básicos que forma la ley moral del ser humano. Su alcance en extensión y en intensidad son poderosos.
Devoraba y desmenuzaba, y las sobras hollaba con sus pies…
Exactamente eso es lo que hace con los que se llaman creyentes.
¿Cuál es nuestra función en este mundo? Porque el propósito de la profecía es alentarnos en medio de las pruebas y dificultades, dándonos la promesa de que Dios tiene el control de todo, y es quien finalmente vencerá. Pero mientras que llega ese momento, Dios permite que ocurran todas estas cosas que describe Daniel en su visión, entonces…
¿Cuál es nuestra función en este mundo? ¿Cuál es nuestro propósito? ¿para que estamos aquí?
Dice nuestro Señor:
Mat 5:13 Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres
¿Qué nos expone Daniel sobre la bestia terrible?
devoraba y desmenuzaba, y las sobras hollaba con sus pies,
Aquí tenemos a esa terrible bestia, llevando a cabo su propósito. Aquí tenemos a aquellos que se llaman creyentes, que han sido devorados por la bestia cuando se han dejado llevar por la corriente de este mundo.
Esta es la realidad terrible de la visión de Daniel sobre esta cuarta bestia. Una bestia que corrompe el entendimiento hasta tal punto, que aquellos que se llaman creyentes y que practican la religión como buenas personas, son destrozados por ella. Son hollados, la bestia ha cumplido su propósito.
Dan 7:25 Y hablará palabras contra el Altísimo, y a los santos del Altísimo quebrantará, y pensará en cambiar los tiempos y la ley; y serán entregados en su mano hasta tiempo, y tiempos, y medio tiempo
El gobierno de este mundo intensifica su presión sobre los más débiles, los niños, manipulando su mente, torciendo su voluntad, babilonizándolos. Actuando inicuamente quiere cambiar la ley, la historia, la familia, la sociedad. Se quiere poner en lugar de Dios hablando como Dios. El establece la ley, el determina lo que es verdad y mentira.
En España, desde el curso pasado se ha empezado a impartir una enseñanza obligatoria en las escuelas desde primaria:
Dice la norma que regula la asignatura:
“La dimensión ética de la competencia social y ciudadana entraña ser consciente de los valores del entorno, evaluarlos y reconstruirlos afectiva y racionalmente para crear progresivamente un sistema de valores propio y comportarse en coherencia con ellos al afrontar una decisión o un conflicto. Para lograr estos objetivos se profundiza en los principios de ética personal y social”
Pensará en cambiar los tiempos y la ley…
Es decir, es el Estado quien le enseña a los niños qué esta bien, y qué está mal. Es el estado quien les adoctrina. Es el estado quien forma la conciencia del ciudadano. Efectivamente se cumple la profecía:
Y hablará palabras contra el Altísimo, y a los santos del Altísimo quebrantará, y pensará en cambiar los tiempos y la ley
A titulo informativo, esta enseñanza que ya está en la mente de los adultos por la influencia de los medios de comunicación, ahora se va a anclar en la conciencia de los niños para quitar su libre examen sobre todo cuanto les rodea y hacerles inútiles para pensar por sí mismos de acuerdo a la conciencia que Dios ha puesto en todo hombre. ¿Recordáis que fue el libre examen la aportación de la reforma a la conciencia de los hombres? El hombre tiene que pensar, pero los gobiernos intentan que el ciudadano no piense, porque así tendrán seres adoctrinados sin criterio para impedir que se puedan enfrentar a ellos.
Hermanos, nos queda mucho por sufrir. Pero a la vez, Dios nos promete su bendición, su ayuda, su gracia, para permanecer alertas y vigilantes en esta lucha.
Lo importante no es que ganemos como pueblo de Dios esta batalla. Lo importante es que nos mantengamos fieles a Dios en medio de una generación perversa. Lo importante es que recordemos que aquel que persevere hasta el final será salvo, lo importante es que seamos fieles hasta la muerte, para que nuestro Dios nos de la corona de la vida.
Hermanos, Daniel fue fiel, sabiendo por medio de estas visiones lo que iba a pasar, y estando solo en Babilonia, la Palabra de Dios le proveyó de fortaleza para que su fe no faltase, manteniéndose firme en medio de tan gran presión.
Nosotros debemos ser fieles a nuestro Dios, aunque sepamos ya que el príncipe de este mundo, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, seguirá usando todo su armamento para acabar con el evangelio, cambiando las leyes, pervirtiendo la justicia, persiguiendo al pueblo de Dios.
Esa es la realidad de la batalla espiritual que se libra y no podemos ser ingenuos ante esta terrible realidad.
Sin embargo se nos da una nota de esperanza y eso nos debe mover a ser fieles:
Rev 12:11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.
…y tu que harás?
De esta guerra que se libra, solo la iglesia es conocedora. Solo la iglesia conoce las armas con las que lucha el enemigo. Solo la iglesia conoce sus métodos de combate. Somos los únicos que estamos al corriente de este conflicto que dura desde que el hombre está sobre la tierra, y que se incrementa.
¿Qué vamos a hacer ante esta situación? ¿Cómo vamos a actuar? ¿De qué manera vamos a enfocar nuestra vida, para que nuestro servicio a Dios manifieste la realidad de nuestra fe, que seamos de beneficio para nuestra generación, que honremos el Nombre del Dios de los cielos, y podamos transmitir el evangelio a nuestros hijos y a los hijos de nuestros hijos?
Satanás va a usar todas sus armas para que el evangelio no sea traspasado a nuestros hijos. Usara la sutileza de Babilonia, usará el desgaste de nuestras responsabilidades, usara nuestras excusas y justificaciones, nuestra falta de tiempo, nuestro afán por tener mas cosas materiales sacrificando las espirituales, va a usar nuestro egoísmo para que no pensemos en la ayuda y apoyo que hay que dar al pueblo de Dios para combatir en esta guerra.
Con todo esto, nos tenemos que hacer muchas preguntas. A lo largo de toda la Escritura, vemos a hombres que se esforzaron y sacrificaron por servir a Dios. En la historia de nuestros propios países, el esfuerzo de otros tantos hombres ha hecho prosperar el evangelio según la voluntad de Dios. Pero, ¿qué pasa con nosotros? ¿Estas dispuesto a presentarte delante de Dios diciendo que tuviste un buen trabajo, o una buena casa, y que aquello te impidió cumplir con las responsabilidades que Dios ha puesto sobre su pueblo?
Hermanos, seamos conscientes de esta lucha entre la luz y las tinieblas, y busquemos el rostro de Dios sin descanso para que renueve nuestras fuerzas en esta lucha.
Suplica al Dios de Daniel que tenga misericordia de ti, y que te aliente para cumplir con su voluntad mientras estés en este mundo.
Suplícale que te use para que seas una columna en el templo de Dios. Implora su ayuda, su bendición, su divina presencia en tu vida. Ora como Daniel, constante y diligentemente, para que las promesas de Dios te ayuden en esta batalla. Únete a los que de corazón sincero sirven al Señor, y trabaja estrechamente con ellos para que seas edificado en tu vida de piedad, y en la ayuda mutua, tan necesaria para recibir también aliento, consuelo, y regocijo, pues todos nosotros como creyentes, somos peregrinos y extranjeros en este mundo, y juntos vamos camino hacia nuestra patria celestial.
NB, 24 de agosto de 2008
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