¿Por qué deberían leer los cristianos del siglo XXI a los Reformadores y, en especial a los puritanos?
El Espíritu Santo revivió la iglesia en la Reforma y en la era de los puritanos, llenando vasijas de barro (hombres como Lutero, Calvino, Perkins, Owen, Bunyan y Edwards) con tesoros de oro espiritual. Dios iluminó a los Reformadores para que redescubrieran verdades bíblicas fundamentales sobre la salvación y la adoración. Los puritanos unieron una espiritualidad vibrante a una rica teología basada en la Biblia.
Siendo como eran personas del Libro viviente, los puritanos moldean la vida de sus lectores con sus propios libros, la mayoría de los cuales con sermones reempacados. Y nos muestran en sus escritos cómo emparejar la doctrina y la práctica cristiana diaria para fomentar el cristianismo experiencial y los frutos de la piedad como la oración sincera, la meditación habitual sobre las verdades de la Biblia, las respuestas maduras a la aflicción personal y la confianza en el Espíritu. Como ningún otro grupo en la historia de la iglesia, sus escritos van dirigidos a la mente con claridad, confrontan la conciencia de forma explícita y enamoran el corazón de un modo apasionado. Los puritanos son, asimismo, maestros a la hora de mantener el equilibrio bíblico en sus escritos, entre las dimensiones subjetiva y objetiva en el cristianismo, entre la soberanía de Dios y la responsabilidad del hombre y entre el arminianismo y el hipercalvinismo, forjando un camino intermedio y rechazando ambas cosas como no bíblicas.
Leer los escritos puritanos conmueve tu alma de sobrecogimiento ante la gloria de Dios, edifica tu menta con fe en las verdades de las Escrituras, enciende tu corazón con amor por Cristo, el Salvador todosuficiente y expande tu vida hasta desbordar sus encogidos charcos de egoísmo para esperar grandes cosas de Dios y emprender grandes hazañas para Él. En otras palabras, los puritanos nos dan combustible para la adoración y para las misiones.
Publicado en Reflexiones con permiso. Traducción de IBRNJ. Todos los derechos reservados. © 2014 IBRNJ.